Aunque se han dado pasos firmes en la ruta del diagnóstico y atención de la cisticercosis, esta enfermedad aún representa un problema de salud pública en México y Latinoamérica declaró Edda Sciutto Conde, del Instituto de Investigaciones Biomédicas de la UNAM.
De acuerdo con la información publicada por la Gaceta UNAM, la investigadora dijo que la forma más grave en que afecta la cisticercosis al humano es cuando se instala en el sistema nervioso central.
Recordó que el cerdo es un eslabón indispensable en la transmisión de esta parasitosis, y es factible interrumpir la transmisión a través de la prevención de la cisticercosis porcina por vacunación.
En un intento por generar un biológico más económico, continuó Sciutto, “produjimos una segunda versión” e indicó que la producción de esta vacuna fue optimizada en alta escala en nuestra planta piloto y se utilizó en un programa de control entre 2009 y 2013 en conjunto con la entonces SAGARPA. Posteriormente se confirmó que el programa de control, vacunación incluida, redujo eficientemente la cisticercosis.
Fuente: Gaceta UNAM.