El Servicio de Administración Tributaria (SAT) ha embargado más automóviles y camionetas “chocolate” que armas cortas y largas en las aduanas instaladas desde Matamoros, Tamaulipas, hasta Tijuana, Baja California.
Los agentes encargados de inspeccionar a los turistas estadounidenses y mexicanos radicados o de viaje por Estados Unidos han incautado más de 421,028 automóviles y vehículos en las 49 aduanas del 1 de enero de 2006 hasta el 1 de octubre de 2020, revela cifras a las que tuvo acceso Forbes México.
El organismo a cargo de Raquel Buenrostro Sánchez logró retener más de 30,063 armas cortas y largas que no llegaron al crimen organizado o bandas de delincuentes de 2008 hasta los primeros días de 2020.
En 2006 y 2007 no registró ni una sola incautación de armamento por los recintos fiscales vigilados por videocámaras, tecnología de punta, así como personal adscrito al SAT encargado de combatir el contrabando y el tráfico de mercancías.
Durante el gobierno de Felipe Calderón, Enrique Peña Nieto y ahora Andrés Manuel López Obrador fueron embargadas 12,029 armas cortas y 18,034 armas largas que procedían de las tiendas en Estados Unidos.
“Las aduanas en México no tienen la capacidad técnica y no poseen la tecnología para detectar las armas en todos los cruces fronterizos, yo cruzo la frontera muchísimo y las revisiones son aleatorias y muchas veces son abre la cajuela”, señala Tony Payán, director del Centro México del Instituto de Políticas Públicas James A. Baker III de la Universidad de Rice, en Texas.
El profesor de la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez (UACJ) dice que los agentes de aduanas inspeccionan lo transportado en la cajuela y se enfocan en ver si llevan computadoras, electrodomésticos, televisores o cualquier producto tecnológico, porque el afán del Servicio de Administración Tributaria es recaudar y cobrar los impuestos.
Las armas pasan sin problemas por las aduanas, incluso están pasando partes de rifles de alto calibre, es decir hay quien pasa primero un componente, luego otro hasta que ya tienes todas las piezas suficientes para ensamblar en suelo mexicano, revela Tony Payán.
Agrega que el gobierno mexicano no tiene ninguna idea de cuántas armas han pasado a México ni cuántas armas existen: “En México existe una sola tienda de armas en la Ciudad de México, así como los militares son los únicos autorizados para otorgar los permiso de portación de armas”. En Estados Unidos se pueden comprar armas de fuego en una armería pequeña, en Walmart y en las 35 mil ferias de armas instaladas en Texas, Nuevo México, Arizona y California, concluye Tony Payán.