Una explicación simplificada del cáncer es que se trata del desarrollo de células anormales que se dividen, crecen y se diseminan sin control.
La división celular es un mecanismo biológico natural, pero cualquier fallo en el proceso de replicación y transcripción del material genético puede hacer que la célula, en vez de morir de forma natural, comience a dividirse sin límite formando las masas, denominadas tumores o neoplasias, que terminan por destruir y sustituir tejidos normales.
Una investigación de la Universidad de Sevilla en el Centro Andaluz de Biología Molecular y Medicina Regenerativa, publicada en Nature Genetics, ha identificado el mecanismo de una de las mutaciones más frecuentes en los tumores, un hallazgo fundamental para entender los procesos cancerígenos y buscar soluciones.
Si la replicación celular fuera como copiar un libro, el ADN serían las letras, que deben situarse exactamente igual en un nuevo ejemplar para que el mensaje sea correcto y la copia cumpla su función.
Algunos genes actúan de supresores tumorales, como el P53, y se encargan de producir proteínas que vigilan y controlan los procesos de transcripción y replicación. Un cambio -mutación- en estos genes puede hacer que no cumplan su función y comience la división celular sin control
Las alteraciones en el P53, conocido como el “guardián del genoma”, son las más habituales detectadas en los tumores. Pero hay otro grupo cuyo mecanismo de mutación ha sido descubierto por los investigadores españoles y que da origen a la segunda mutación más frecuente en los cánceres.
Este nuevo mecanismo, cuyo papel no estaba claro hasta la investigación recién publicada, comienza en un complejo de proteínas, conocido como cromatina, que tiene como función remodelar y acomodar la cubierta del ADN para permitir la expresión de los genes o la replicación del genoma.
En ese proceso de actuar sobre el envoltorio del ADN juega un papel fundamental el Brahma-related gene-1 (BRG1), un componente de la cromatina y modulador crítico para regular la transcripción, reparación y recombinación genética en los procesos celulares.
Los investigadores ahora trabajan en determinar cómo será posible propiciar que el guardian celular pueda realizar su trabajo correctamente para evitar que en la replicación celular se pierda la información que permita generar células sanas.