En el año 2003, los principales sellos discográficos del mundo atravesaban una feroz batalla legal en contra de servicios de piratería online como Napster, Kazaa, LimeWire, quienes ofrecían a los usuarios la posibilidad de descargar y compartir música de forma gratuita.
Esta lucha por preservar su modelo de negocios significó el colapso de su industria, afirma la revista Forbes en su edición digital distribuida mediante su sitio de internet.
La Revista dice que como Peter Diamandis y Steven Kotler describen en su libro “Abundancia”, el auge de las tecnologías exponenciales está generando una abundancia de todo.
Ahora podemos acceder a la información del mundo a través de Internet; podemos tomar fotografías y grabar videos de forma ilimitada para distribuirlo en plataformas con miles de millones de horas de contenido gratuito.
Este es un ejemplo de cómo una innovación puede trastocar toda una industria y volverla obsoleta, donde la pregunta que surge no es “¿le puede suceder a mi industria?”, sino “¿cuándo le sucederá?”
Futurólogos expertos de Silicon Valley como Salim Ismail, predicen que la próxima industria que podría desaparecer o transformarse como la conocemos, es la industria automotriz; lo que repercutirá en fabricantes, transportistas y hasta empresas aseguradora.
Un estudio de la Universidad de Columbia en Nueva York llegó a la conclusión que se podría transportar a toda la población de Manhattan con sólo 9,000 vehículos autónomos, lo que representaría tan sólo el 6.8% del total de 133,000 vehículos que actualmente circulan en las calles.
La respuesta inicial por parte de los trabajadores de transporte será negativa y de gran nerviosismo, viendo el cambio como una amenaza, así como en su momento lo fue Uber para la mayoría de las ciudades del mundo, pero tanto conductores y fabricantes tendrán la oportunidad de obtener nuevos puestos de trabajo y desarrollar organizaciones tecnológicas.
El Foro Económico Mundial espera que las innovaciones tecnológicas eliminen 85 millones de puestos de trabajo en todo el mundo para 2025. Sin embargo, estas tecnologías a su vez ayudarán a crear 97 millones de oportunidades laborales que requerirán un perfil con habilidades diferentes. La revolución digital puede transformar todas las industrias, si no se está preparado para adaptarse y evolucionar, las empresas e industrias podrían desaparecer. Por ello, es esencial innovar en los modelos y estructuras empresariales que evitan proteger a toda costa lo que ha funcionado antes.