La muerte de dos líderes indígenas en el estado de Guerrero vuelve a llamar la atención sobre la negligencia del gobierno en cuanto a la protección de las comunidades indígenas azotadas por organizaciones criminales en todo México.
En octubre de 2021, miembros de la comunidad y activistas alertaron sobre los planes de Los Ardillos de expandirse hacia el valle El Ocotito, pero hubo poca respuesta de las autoridades.
Las advertencias sobre un ataque se hicieron realidad en enero de 2022 cuando una confrontación entre los criminales y la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero, un grupo indígena de autodefensa, dejara como resultado un saldo de cuatro muertos de la comunidad.
Esas muertes son apenas un episodio más de una serie de ataques a las comunidades indígenas de Guerrero. En enero de 2020, Los Ardillos masacraron a diez músicos indígenas en Chilapa, Guerrero.
De acuerdo con el sitio InSight Crime, en los lugares más aislados de México, las comunidades indígenas son blanco de la opresión constante y sistemática de las organizaciones criminales locales, como lo muestra el caso de Los Ardillos y su agresión contra la comunidad Nahuas.
Anteriormente, el grupo supervisaba la siembra de amapola y el tráfico de heroína, para lo cual obligaba a las comunidades locales a trabajar en los cultivos bajo sus órdenes, según denuncias de las víctimas ante la policía en 2019.
Pero desde que bajó la demanda de heroína, han comenzado a depender de la extorsión, el secuestro y la minería ilegal.
Y también en este escenario, la comunidad local debe pagar o ser reclutada para el trabajo forzado en beneficio de esos grupos.
Y la suerte de la comunidad Nahuas la comparten otras en Guerrero. En la Sierra Tarahumara, cadena montañosa que atraviesa el estado de Chihuahua, los indígenas rarámuri y otras comunidades más llevan años sufriendo por causa del crimen organizado.
La tala ilegal, el cultivo de amapola, el despojo de tierras y la minería ilegal han arruinado las vidas de los rarámuris, muchos de los cuales han sido desplazados y asesinados.