El Banco Mundial (BM) es el primer organismo multilateral que expone una radiografía económica del presente sexenio no sólo por los resultados que presenta los primeros cuatro años de gobierno –en los que hubo un retroceso económico de -0.9%–, sino porque proyecta una modesta recuperación para 2023 y 2024.
Según los datos y proyecciones del informe Perspectivas Económicas Globales del BM, divulgado este mes, el presidente que como candidato prometió un crecimiento económico anual de 4% en promedio se quedará muy lejos de esa meta, ya que durante su gobierno el país crecerá menos de medio punto cada año, apenas 0.38%.
De esta manera, actual gobierno federal será el de más bajo desempeño económico desde hace 36 años, cuando en medio de la crisis de la deuda el gobierno de Miguel de la Madrid (1983-1988) dejó un crecimiento del PIB de sólo 0.33% anual promedio.
En este sexenio, la economía mexicana será, además, la de peor comportamiento en América Latina. No existe en el informe del BM –en el que no figura Venezuela “por fata de datos confiables”– ningún otro país latinoamericano con un crecimiento tan bajo en el periodo como el de México.
Presidencia de la República suele culpar a la pandemia del covid-19 de los pobres resultados económicos, sin embargo la realidad dice otra cosa.
Todas las naciones de América Latina, al igual que el mundo, padecieron esa calamidad, y aun así todas ellas crecieron más que México y, a diferencia de este país, ya lograron recuperar el PIB prepandemia.
De acuerdo con los datos y proyecciones del BM, entre 2019 y 2024 la economía de Brasil crecerá, en puntos porcentuales, 3.8 veces más que la mexicana; la argentina, 3.3 veces más, y la de Guatemala ocho veces más.
Hasta el PIB de Nicaragua, país sometido a sanciones por la represión y las medidas dictatoriales de Daniel Ortega, acumulará un crecimiento de 13.4% en el periodo 2019-2024, cinco veces más que el de México, que no ha logrado recuperar el nivel económico prepandemia.
Dos factores ayudan a explicar el rezago económico de México este sexenio: la caída de la inversión pública y privada y la decisión federal de no implementar durante la pandemia políticas de estímulo fiscal de mayor impacto.
Según datos del Fondo Monetario Internacional, México fue el país latinoamericano que menos recursos destinó –apenas el equivalente a 0.7% del PIB– a medidas de estímulo fiscal orientadas a reactivar la economía y apoyar a las familias y a las empresas durante la pandemia.
